Es una técnica natural basada en un intenso masaje que se realiza con utensilios de madera, que se van friccionando por la piel con diferentes intensidades y de diferentes formas, tamaños y diseños. Estos instrumentos se adaptan a las distintas partes del cuerpo consiguiendo la estimulación del mismo.
El tratamiento está diseñado para lograr efectos reductores, anticelulíticos y tonificantes. Mediante este método se ayuda a:
– Reducir los niveles de estrés. La aplicación y el masaje dado con los utensilios de madera caliente ayudan a alcanzar un estado de relajación, el organismo libera las toxinas, se activa la renovación celular, reafirma y tonifica los tejidos.
– Ayuda a combatir la celulitis. Elimina la acumulación de grasa de diferentes partes del cuerpo (caderas, espalda, abdomen). Gracias al masaje se activa la microcirculación y se elimina la retención de líquidos.
– Alivia dolores musculares y articulares. Cómo el de espalda o cuello por ejemplo, si siente pinchazos en articulaciones o dolor muscular, ésta técnica le ayudará en su mejora, en la primera sesión ya lo notará.
– Conseguir un estado de relajación. Al ser una técnica holística, que contribuye a la estimulación energética, tranquilidad emocional…
La sesión consta de tres etapas en la mayoría de los casos. La primera es una maniobra de bombeo o masaje linfático para valorar las zonas a tratar y moldear, así se detecta donde existen mayores acúmulos de grasa. En segundo lugar se realiza un masaje reductor con aceites esenciales reductores mezclados, ya que por sí solos irritarían la piel. Por último, se realiza el masaje con los instrumentos de madera. Los instrumentos más utilizados en este tratamiento son el rodillo liso, rodillo estriado, rodillo de cubos, la tabla modeladora y la copa sueca.
El busto es un punto clave de la maderoterapia. Los instrumentos utilizados remueven y drenan la grasa mal localizada a las áreas donde es requerida. Por otro lado, la maderoterapia facial reafirma la piel del rostro, cuello…se consigue aumentar la oxigenación del cerebro, reducir la papada y alisas las líneas de expresión.
Los resultados empiezan a ser visibles a partir de la tercera sesión y se recomiendan entre 10-15 sesiones para resultados óptimos. Es recomendable acompañar las sesiones con una dieta saludable y controlada en calorías.
Laura González Chavarrías
Diplomada en Nutrición Humana y Dietética