Los niños se forman una visión positiva o negativa de sí mismos basándose principalmente en lo que ven en el espejo, que puede ser real o una visión distorsionada de quién son realmente. La imagen que un niño ve es fruto del aprendizaje que adquiere a lo largo de la vida y de las influencias que recibe.
Padres, familiares, amigos, profesores, compañeros de clase… Todos ellos influyen sobre la imagen que percibe en el espejo cuando se mira, reforzando aquello que piensa y siente sobre sí mismo. También intervienen otros elementos como los medios de comunicación e incluso los juguetes con los que se divierte.
Todos estos estímulos le ayudan a conformar su imagen personal (autoimagen), es decir, cómo ve su yo físico, si se siente atractivo y si a los demás les gusta su apariencia. Para muchos niños y adolescentes, la imagen personal puede estar estrechamente relacionada con la autoestima.
Estos dos conceptos, imagen personal y autoestima van ligados, y cuando no están en consonancia pueden acarrear trastornos de alimentación y problemas en la salud mental de los más jóvenes.
Muchos de ellos lidian con su autoestima y su imagen corporal, sobre todo cuando comienzan la pubertad, momento en el que el cuerpo cambia. Estos cambios de la adolescencia combinados con el deseo de sentirse aceptados por su entorno y por los miembros de un grupo (como seres sociales que somos) lleva a muchos niños a compararse con los demás y, en ciertos casos, acarrea un rechazo de su imagen y una autoestima baja.
¿Cómo podemos ayudarles a desarrollar una autoestima positiva para afrontar la vida con optimismo? Vamos a verlo.
¿Cómo fomentar una autoestima saludable en niños y adolescentes
Los estudios al respecto revelan que el 65 % de los adolescentes se sienten insatisfechos con su cuerpo. La realidad es que cada vez más niños y adolescentes se sienten preocupados por su apariencia física y su imagen personal, algo que incide directamente en su autoestima.
En su mente está la idea de que necesitan cambiar su apariencia física para sentirse bien consigo mismos. En cambio, lo que deben cambiar es la forma en que ven su cuerpo y su pensamiento sobre sí mismos.
Con estos tips te resultará más fácil ayudarles a reforzar su autoestima.