Las cerezas son una fruta, normalmente, de color rojo claro u oscuro aunque también hay variedades de color amarillo. De forma redondeada y pulpa jugosa con hueso. Su sabor puede ser dulce o ácido.
Su contenido calórico es bajo y aportan fibra que ejerce un efecto saciante, por tanto es interesante su consumo en dietas de adelgazamiento.
Debido a su composición nos proporcionan grandes beneficios para la salud.
Las cerezas tienen un gran poder antioxidante debido a su alto contenido en vitamina C y flavonoides. Son la fruta con mayor contenido en antocianinas, un flavonoides. También contienen ácido elágico, el cual inhibe la reproducción de células cancerígenas. Por su acción antioxidante, también protegen los capilares y previenen las enfermedades cardiovasculares.
De igual forma nos protegen de la aparición de manchas, arrugas y flacidez de la piel, es decir, previenen su envejecimiento.
Contienen bastante hierro por lo que es un alimento interesante para aquellas personas con anemia.
El consumo diario de esta fruta regula los niveles de ácido úrico con lo cual pueden ayudar a personas que padezcan este problema; así como a personas con artritis y reumatismos en general.
Son muy depurativas, regulan el tránsito intestinal debido a su contenido en fibra y ayudan a eliminar los líquidos retenidos por su contenido en potasio.
Además de potasio también contienen, aunque en menor proporción, calcio y zinc, por lo tanto nos ayudarán a combatir la osteoporosis y otros problemas relacionados con la formación de huesos y dientes. Es interesante consumir cerezas en la menopausia por este motivo.
Noemí Rodríguez Palacios
Diplomada en Nutrición Humana y Dietética
de Adelgar