Conocida también como “cereza de las Indias Occidentales”, es una fruta muy jugosa, suave y con un sabor agridulce, nacida de un árbol. Es propia de América Central, Sudamérica y el Caribe.
Aunque por su apariencia se puede confundir con las cerezas, por dentro son muy diferentes, ya que tiene gajos y tres semillas.
Es el fruto comestible con mayor concentración de vitamina C, muchísimo más alto que el de las naranjas (20-30 veces más), también es rica en antioxidantes (carotenos y polifenoles con propiedades antiinflamatorias). Además, contiene micronutrientes como magnesio, vitamina B1, B2, niacina, ácido pantoténico, calcio, hierro, fósforo y potasio.
Usos y propiedades
- Recomendado para la prevención contra gripes y resfriados comunes, y también durante dichas enfermedades, ya que posee propiedades curativas.
- Es inmuno-estimulante (gérmenes y virus) y fungicida (hongos). Activa los anticuerpos naturales del organismo.
- Su consumo ayuda con el estrés físico, la fatiga, debilidad, e incluso con la ansiedad o depresión. Esta fruta ayuda a la producción de hormonas como la melatonina (antiestrés) las cuales ayudan a regular los ciclos de sueño.
- Es desintoxicante y diurética, limpia el organismo. Es un alimento muy recomendable en personas que estén dejando adicciones como fumar o beber, ya que también contiene antioxidantes como los flavonoides y antocianinas que paran la destrucción de las membranas celulares.
- Ayuda a la formación de colágeno. Recientemente en la cosmetología han empezado a utilizar el extracto de acerola en productos para el cuidado de la piel y el rostro, contra el envejecimiento de la piel, gracias a sus poderes antioxidantes, no solo por el alto contenido en vitamina C, también posee un alto contenido en sales minerales que ayudan con la remineralización de pieles cansadas y estresadas.
- Tiene propiedades hidratantes gracias a su alto contenido en mucílagos y proteínas (piel, cabello e incluso el organismo).
El Equipo Adelgar