¿Qué es la Gastroplastia en Manga y para quién?

A la hora de bajar de peso, una opción que puedes contemplar es la Gastroplastia en Manga. Es un procedimiento que ofrecemos en Adelgar y que puede ayudarte a lograr tus objetivos. Descubre si es para ti y cómo puede ayudarte.

La gastroplastia en manga o manga gástrica es un tipo de procedimiento quirúrgico enfocado a la pérdida de peso.

Estamos ante una forma de cirugía bariátrica que tiene como objetivo reducir el tamaño del estómago para que el paciente sienta saciedad más rápidamente a la hora de comer. De esta forma, come menos y adelgaza.

Estamos ante un procedimiento cada vez más popular debido a sus resultados positivos. Asimismo, presenta un menor riesgo si lo comparamos con otros procedimientos de cirugía bariátrica.

Durante una gastroplastia en manga, se retira una gran porción del estómago para crear una especie de «manga» o tubo estomacal estrecho y alargado. De tal forma que se pueda reducir la capacidad del estómago y limitar la cantidad de alimentos que se pueden consumir.

También puede reducir la producción de la hormona grelina. Esta hormona es considerada como responsable de la sensación de hambre, por lo que también puede ayudar a que sientas que tienes menos hambre.

En cuanto a la cirugía en sí, se lleva a cabo mediante cirugía laparoscópica mínimamente invasiva. En la intervención se realizan varias incisiones pequeñas en el abdomen y la porción del estómago se extrae mediante el uso de grapas quirúrgicas especiales.

La duración es de 1-2 horas y se hace bajo anestesia general. Además, el tiempo de recuperación es rápido, de apenas un par de días.

Tras someterse a esta intervención, el paciente puede experimentar una gran pérdida de peso. Los resultados pueden variar según la persona, porque igualmente deberá seguir una dieta saludable y un estilo de vida activo.

Por lo general, los datos que se contemplan son de una pérdida de peso de entre el 50% y el 70% en cuestión de 18 a 24 meses después de la cirugía.

La gastroplastia en manga se recomienda a pacientes con un IMC de 30 – 40. Es decir, con un grado alto de obesidad. Pero también puede ser interesante para quienes sufren de problemas relacionados con la obesidad como diabetes tipo 2, hipertensión arterial o enfermedades cardiovasculares. Incluso puede ayudar a reducir los riesgos de enfermedades relacionadas con la obesidad.

En cualquier caso, los pacientes deben ser evaluados cuidadosamente por un especialista para poder determinar si es un claro candidato al procedimiento.

Asimismo, aparte de realizar la cirugía, los pacientes deben comprometerse a seguir un plan de dieta y ejercicio a largo plazo para asegurar el éxito de la cirugía y también para mantener una pérdida de peso saludable.